Tema: Perdón
¿Quién puede amar?
Gracias a la disculpa sincera, ¡amorosa!, nos sentimos amados por cómo somos y no por lo que hacemos: en el perdón se fundamenta el verdadero amor
El mal de orquesta
Cuando en nuestras relaciones más cercanas se dé la ocasión para la música, se dará con ella la oportunidad para la disculpa del descuido ajeno, para comprender que todos nos tuteamos en la miseria
Abrazar a un asesino
Por mi torpe recuerdo, y sabiéndolo ahora, creo que volvería a abrazar fuertemente a aquel asesino encantador y decirle «feliz Navidad»
Yo no pido perdón
Ni los españoles ni los blancos ni los varones ni los católicos han de pedir el perdón que se les reclama, precisamente, por parte de quienes les odian
El poder transformador del perdón
Necesitamos más, quizá mucho más en estos días en que los meros desaires involuntarios encienden una cruda tensión e indignación.