El pasado domingo 23 de marzo, las calles de Madrid se tiñeron de verde esperanza durante la XV edición de la Marcha Sí a la Vida. Este evento multitudinario ha sido organizado por la plataforma Sí a la Vida, que agrupa a más de 500 asociaciones provida. La marcha, que coincidió con el Día Internacional de la Vida celebrado cada 25 de marzo, congregó a miles de personas que recorrieron el centro de la capital para defender «el derecho a nacer» y expresar la dignidad de la vida «desde la concepción hasta la muerte natural».
La marcha, que según los organizadores contó con la asistencia de 40.000 personas, inició a las 12:00 horas en la intersección de las calles Serrano y Goya, avanzando por la Plaza de Cibeles hasta culminar en el Paseo de Recoletos. Los asistentes portaban pancartas con lemas como «El embrión es un ser humano», «El aborto detiene un corazón latiendo» y «El derecho a la vida es para todos sin excepción».
Durante el acto se compartieron testimonios conmovedores de familias que optaron por la vida pese a diagnósticos médicos adversos. Una madre relató cómo, a pesar de la recomendación de interrumpir su embarazo debido a complicaciones, decidió seguir adelante, y hoy su hijo Pedro, con dos enfermedades graves, es parte de su familia. ¡Una familia numerosa con nueve hijos!
Además, se realizó una ecografía en directo a una mujer embarazada de 26 semanas que había enfrentado problemas de fertilidad, destacando la importancia de cada vida desde su inicio. Desde el escenario instalado en el Paseo de Recoletos la marcha concluyó con un minuto de silencio y una suelta de globos verdes en memoria de las víctimas de la «cultura de la muerte».
Alicia Latorre, portavoz de la Plataforma Sí a la Vida y presidenta de la Federación Española de Asociaciones Provida, resaltó la importancia de la unidad y el compromiso en la defensa de la vida humana, desde la concepción hasta la muerte natural. Latorre afirmó: «Es una marcha de mucha alegría y de compromiso, porque estamos defendiendo algo que nos atañe a todos, que es la vida, y porque está respaldado por asociaciones que a lo largo de todo el año están al servicio de la vida humana en sus distintas etapas. Es una forma de decir que aquí estamos y no nos vamos a conformar con que se pretenda normalizar la cultura de la muerte y las leyes que quitan la vida y que consideran un derecho».
La jornada se desarrolló en un ambiente festivo y reivindicativo, reafirmando el compromiso de los participantes en la defensa de la vida y los derechos de los no nacidos. El broche final lo puso Green Velvet, un grupo de música que ya ha tocado en anteriores ediciones y que amenizó el evento para todos los asistentes con grandes himnos en favor de la vida como «Color esperanza», «Nada de esto fue un error» o «Tenía tanto que darte».



