Más de mil médicos de familia y pediatras, amparados hasta ahora en la jubilación activa mejorada, abandonarán sus puestos el 28 de diciembre si el Gobierno no prorroga la medida, cuya vigencia expira después de tres años de prórroga. En algunos centros, hasta un 25% de la plantilla cesará de la noche a la mañana. La bolsa de empleo está vacía tras dos décadas de planificación negligente.
El colapso no es un imprevisto, sino la culminación de un deterioro que quedó al descubierto con el virus y al que la presión demográfica impulsada sólo por la inmigración masiva ha dado la puntilla. En un año, la población residente en España ha crecido en más de un millón de personas, lo que tensiona aún más los recursos limitados, pensados para un país de menos habitantes.
Las listas de espera se alargan cada día, las urgencias colapsan y los españoles ven mermado su acceso a una atención digna y a tiempo, a veces con consecuencias fatales.


